lunes, 12 de abril de 2010

Solo se concluye esta etapa, no espero que sea el final



Al inicio del seminario nos comentaron que íbamos a trabajar con un niño en factor de riesgo durante el mes de marzo. Debíamos ir a su casa y empezar un proceso de Intervención Temprana con él y con su familia. Me sentí emocionada y nerviosa al mismo tiempo, debido a que todavía no me habían confirmado el caso con el que iba a trabajar. ¡Qué difícil que fue conseguirlo!

Antes de iniciar, tenía ciertas expectativas sobre los progresos del niño y de la familia con quien trabajé; me he dado cuenta que los he cumplido, lo que me llena de gran satisfacción. Al empezar los primeros pasos del proceso, pude notar que era un gran trabajo y responsabilidad lo que estaba haciendo, por lo que lo tomé con mucho respeto y dando lo mejor de mis conocimientos, demostrando profesionalismo. Dentro de todo el proceso investigué constantemente para poder llevarles a la familia y al niño nuevas recomendaciones y datos que les sean de ayuda.

La actitud de la mamá, de manera especial, frente a todo el proceso fue cambiando de manera impresionante cada día. El primer día que la conocí estaba seria y muy observadora. Me sentí nerviosa, me encontraba pensativa tratando de comprender lo que ella pensaba de mí. Es cierto que aparento menos edad de la que tengo, pensé. Por lo que sentí empatía hacia ella al comprender que debe ser difícil el autorizar a una persona nueva a entrar a su casa a trabajar con su hijo. En ese momento le agradecí.

Durante todo el proceso, fue realizada una Historia Clínica, una Guía Ecológica con su Plan Remedial, tres evaluaciones con las dos Listas de Habilidades de Desarrollo Evolutivo (Cunningham-Sloper y DEN), los respectivos análisis de cada una, los tres Planes Individuales correspondientes con sus logros y observaciones y un Informe detallando todo el proceso. Cada uno de estos pasos fue llevado a cabo a su respectivo tiempo y según la evolución del niño.

Los días pasaban y se notaban nuevos avances tanto en el desarrollo evolutivo del niño, como en el interés de la familia. Hubo grandes logros como son el control de sus extremidades, control cefálico, mejor tonicidad muscular, fijación de rostros y seguimiento con mirada, agarra objetos con mayor precisión, sonrisa social, control sobre su linea media y se encuentra en constante movimiento llamando la atención de la familia cuando nadie está cerca de él. Otros objetivos que fueron planteados no han sido dominados, pero se han podido notar los avances, por lo que siguen anotados en el plan de intervención con sus respectivas actividades.

Este proceso ha sido interdisciplinar porque, aunque no pude trabajar directamente con diversos profesionales, ya que tuve pequeños inconvenientes al tratar de proponerles algún tema basado en resultados, intenté conocer más allá del trabajo que yo estaba realizando. Me mantenía en contacto con la mamá todos los días, si no era dentro de su casa, era por vía telefónica. Yo le pedía exámenes y recomendaciones médicas para estar enterada de lo que sucedía con el niño y yo también ponerlo en práctica.

Ya para el final del proceso, me alegra comentar que me siento orgullosa de haber trabajado con una familia tan acogedora, quienes me permitieron entrar y me dejaron aprender. Me alegra mucho el poder haber realizado un trabajo ecológico; éste me permite sensibilizarme frente a situaciones como ésta, debido a que conozco a fondo no solo la situación actual y antecedentes del niño, sino que de la familia y de los entornos más inmediatos, teniéndolos en cuenta en involucrándolos a la intervención.

No puedo olvidarme de comentar que he aprendido mucho. He aprendido a ser más paciente en los procesos, a que con constancia y perseverancia y se logran grandes resultados, dichos resultados deben ir en conjunto con conocimiento, investigaciones del caso y trabajo con distintos profesionales. Aprendí, por otro lado, a perder este pequeño temor que le tenía a trabajar la sesión frente al público. Aprendí que debo seguir aprendiendo, que el conocimiento, así como es el desarrollo, es evolutivo. Esta experiencia me ha servido para demostrarme a mí misma que esta es mi profesión, que es lo que deseo hacer de ahora en adelante. Deseo recordar y seguirme sintiendo motivada como lo he hecho hasta ahora.

jueves, 1 de abril de 2010

Calidad + Cantidad = Felicidad




En estos últimos días he notado que Pedrito ha tenido mayores avances relacionados con las actividades que hemos estado realizando junto a la famillia y en relación a las recomendaciones y correcciones que llevamos a cabo, las que fueron publicadas la entrada anterior.

La Mamá y el Papá de Pedrito están cada vez más contentos al observar los avances. Los hermanos son un gran apoyo para la familia, debido a que ellos mantienen a Pedrito en constante estimulación, jugando con él, conversándole, llamándolo por su nombre, dándole los juguetes en las manos, entre otros. La mamá, por otro lado, es muy constante en realizar las sesiones, por lo que ese gran apoyo por parte de la familia, esa apertura que ellos me siguen brindando para yo poder aprender, me ayuda a sentirme contenta de este proceso.

Me alegra mucho el seguir observando avances en Pedrito cada día. Hace poco fue iniciado el objetivo de fortalecer la sonrisa social y ya se está observando que él desea hacerlo cuando le hacen alguna gracia; mientras antes no lo cumplía. Otros avances que también han sido notorios son: cuando son realizadas las sesiones se está en constante comunicación, por lo que Pedrito ahora está más atento a ella y a veces responde con gorgoreos. Ahora todos los objetos que están cerca de él son llevados a la boca, lo hace con mayor frecuencia, está más interesado por las cosas que pasan en su entorno. En cuanto a la posición de línea media, las piernas están ubicadas casi por completo en ella, lo que lleva como consecuencia que tenga mejor posición corporal y pueda pronto pasar al objetivo de girarse solo a posición decúbito prono (boca abajo). Otro aspecto que lo apoyará mucho al momento de girarse es el control de su cabeza. Él empieza a tener mejor control cefálico, por lo que puede controlarse mejor al girarse de decúbito supino a decúbito prono, aunque todavía no lo hace solo y debe tener un apoyo antes de llevarlo a la siguiente posición. Una de las últimas recomendaciones es que, al cargarlo, lo coja de frente para que él deba hacer el esfuerzo de sostener el peso de su cabeza y así seguir con el plan de fortalecimiento del control cefálico. Todos estos avances demuestran que la familia está muy interesada en continuar con más avances tanto en el desarrollo de Pedrito, como en la relación de ellos como familia.

Cada día me siento más contenta de ir a visitar a Pedrito y poder conversar un rato con la familia sobre lo que sienten y han visto. Siempre espero tener una nueva recomendación, un nuevo conocimiento que pueda comentarles y que a ellos les pueda servir. Debemos recordar que la calidad del servicio que se esté ofreciendo y la cantidad de tiempo que la familia esté dispuesta a otorgar darán como resultado felicidad, debido a los progresos en el desarrollo evolutivo que sean observados.